El movimiento del caballo
El caballo se caracteriza por su peculiar
movimiento, completamente distinto al del resto de las piezas. El caballo se
dice que “salta”, esto quiere decir que prescinde de las piezas propias o
contrarias que haya a su lado, para efectuar su movimiento.
En el siguiente diagrama están señaladas con colores las posibles casillas a las que puede acceder el caballo en esta posición
Podremos tener en cuenta una regla para
acordarnos del movimiento del caballo: su recorrido lo hace en forma de “L”, es
decir, una casilla de frente y dos de lado, o dos de lado y una de frente.
También nos puede ser útil comprobar que la
casilla a la que se desplaza un caballo siempre es de un color distinto al de
la casilla de la que sale. La única cosa que importa es que la casilla a la que
tiene que desplazarse esté libre, es decir, que no hay ninguna pieza que se lo
impida.
Si la casilla a la que puede acceder el caballo
está ocupada por una pieza contraria, tendrá la opción voluntaria de
capturarla, o no, según le convenga.
Sin embargo, la mejor manera de familiarizarse
con el movimiento del caballo es practicarlo sobre un tablero vacío hasta que
no nos quede ninguna duda.
El movimiento del peón
El peón es, individualmente, la pieza menos
potente. No obstante, su valor no puede ser despreciado, ya que, como veremos,
tiene una gran trascendencia en el transcurso de la partida.
El peón avanza de a una sola casilla cada vez,
exceptuando el primer movimiento, en el que tiene la opción de dar uno o dos
pasos según le convenga. No existe la posibilidad de jugar dos peones a la vez,
aunque sea una sola casilla, ya que en ajedrez, sólo se puede mover una pieza
en cada jugada, salvo en el caso del enroque, que ya veremos más adelante.
El siguiente diagrama nos muestra las dos
casillas a las que puede desplazarse el peón en el momento de la salida. Sea
cual sea su movimiento, a partir de aquel momento, ya tan sólo podrá avanzar un
solo paso durante el resto de la partida
El modo como captura el peón
El peón captura únicamente en diagonal y efectuando
un solo paso. Es la única pieza que toma de un modo distinto de cómo se mueve.
Por este motivo, si encuentra una pieza delante suyo en la misma columna, no
puede capturar ni avanzar.
Por ejemplo en la posición del diagrama, el
peón puede capturar el caballo o la torre, pero no el alfil que tiene en frente
suyo.
Para recordar:
·
Si tocamos una pieza estamos
obligados a moverla.
·
Si hemos soltado la pieza en
una casilla, ya no podemos cambiar de movimiento
·
Si queremos colocar bien las
piezas que no están bien centradas en las casillas que ocupan, tenemos que
decir de tocarlas la palabra “compongo”
·
Todas las piezas capturan del
mismo modo como se mueven, excepto el peón, que lo hace de manera distinta.
·
El rey nunca puede desplazarse
a una casilla dominada por una pieza contraria.
·
Un
peón que corona puede ser cambiado por la pieza que más convenga, excepto el
rey y el propio peón (normalmente se elige una dama pero no siempre).
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